Civilisation Amérique Latine

La segunda República 1931-1936 El periodo histórico que abarca la segunda república se divide en 3 etapas. I – la primera etapa de la segunda República (abril de 1931- noviembre 1933) : el gobierno provisional de Niceto Alcalà Zamora (ancien monarchiste, conservateur ) y el primer bienio ( période de 2ans ) Republicano ( diciembre 1931 – noviembre 1933). a) El marco cronológico. Al ganar los republicanos las elecciones municipales de 12 de abril de 1931, se proclamó la segunda república española el 14 de abril de 1931. Para preparar el cambio de régimen se formó un gobierno provisional precedido por Niceto Alcalà Zamora, une conversador y antiguo monarquista. Durante los 6 meses que ejerció el poder, este gobierno provisional realizó la político prevista en el Pacto de San Sebastián. Este pacto lo habían firmado todas las fuerzas políticas españolas de la oposición al final de la dictadura de Primo de Rivera con el fin de volver a instaurar la democracia en España. Con el objetivo de restaurar la democracia y elaborar una nueva constitución, el gobierno provisional de Niceto Alcalà Zamora convocó elecciones a Cortes Constituyentes el 28 junio de 1931, triunfó la coalición republicana-socialista, la constitución se aprobó el 9 diciembre de 1939. al día siguiente Niceto Alcalà Zamora fue designado presidente de la segunda república. El nuevo Jefe de gobierno fue Manuel Azaña. Así fue como se concluyó la etapa provisional de la segunda república y como empezó el primer bienio republicano. Durante el primer bienio republicano, las fuerzas políticas que participaron en el ejercicio del poder fueron muy diversas. El gobierno de Manuel Azaña contó entre sus filas a republicanos convencidos, socialistas, centristas y a autonomistas catalanes y vascos. El régimen republicano sufrió de la no participación de los anarquistas. La Conferedación Nacional de Trabajo(CNT) y la Federación Anarquista Ibérica(FAI) preconizaron a lo largo del régimen republicano la abstención electoral. Los anarquistas se pronunciaban a favor del comunismo libertario y de la insurrección. b) La situación económica. Cuando España proclamó la segunda república, contaba con una población que superaba los 23 millones de habitantes. La población activa que se dedicaba a la agricultura había pasado de un 65% al principios del siglo XX a un 45% en los anos 30. A pesar de dicho cambio, España seguía siendo un país básicamente agrícola. También seguía existiendo el problema de la proprieda, de la tenencia de la tierra. El latifundismo, es decir la existencia de las grandes propriedades agrícolas, a un privaba a la mayoría del campesinado de la posesión de las tierras que labraba(labouré). La mayoría de los campesinos españoles eran jornaleros miserables que apenas alcanzaban un nivel de vida mínimo gracias a sus fuerza de trabajo. De modo que la reforma Agraria fue unas de las preocupaciones mayores de la segunda re publica. Al nivel económico, la segunda República sufrió las consecuencias de la crisis mundial iniciada en 1929. Aunque dicha crisis fue menos importante que en el resto de los países industrializados, la crisis se dejó notar sobre todo en el comercio exterior. Las exportaciones españolas basadas en la minería, el carbón, la siderurgia percibieron el impacto de la crisis así como la industria textil Catalana. Al aumentar el paro obrero y al cansar el 12,8% de la población activa, fue el proletariado el que pareció con más fuerza la crisis. En 1935, España contaba con 675 000 parados, lo que produjo fuerte expansiones sociales. c) Las reformas A principios de la segunda República, el trabajo realizado por el Ejecutivo y las Cortes(le parlement) fue bastante importante. En los años 30, la sociedad española necesitaba grandes reformas. El esfuerzo mas destacaba fue realizado en materia de educación. A principio del siglo XX, España seguía contando con un 40% de analfabetismo. La segunda República realizó una

considerable inversión a favor de la escolarización y de la enseñanza pública construyendo en 1931, 7000 escuelas y 6500 más entre 1932 y 1933. El número de alumnos pasó de unos 70 900 en 1930 a unos 130 500 en 1934. Entre el mes de abril de 1931 y noviembre de 1933, la segunda República elaboró el Estatuto de Autonomía de Cataluña, declaró la Libertad Religiosa y promulgó una avanzada legislación social. El nuevo régimen también se atacó a la reforma agraria y a la reforma del ejército. Nada mas (dès que) empezar la segunda República, Niceto Alcala Zamora tuvo que enfrentarse al problema nacionalista catalán. El mismo 14 de abril, es decir justo cuando se proclamó la segunda República, Francesc Maciá, el líder nacionalista catalán, proclamó la República catalán dentro de la República federal española. Sin embargo, el gobierno convenció a Francesc Maciá par que renunciara de momento a una República catalana y par que formara un gobierno regional la Generalitat (catalana), y eso en espera de la redacción y aprobación de la nueva constitución española y de un estatuto de autonomía catalana. El texto fundamental (la carta magna, la constitución) de 1931 definiría a España como un “Estado integral”. Con esta expresión, se querría crear un tipo de estado cuya organización se encontraba a mitad de camino entre el estado unitario y el estado federal. El objetivo era crear un tipo de estado dotado por su constitución de los mecanismos adecuados para poder integrar en su seno regiones dotaras de autonomía. Dicho de otro modo (autrement dit), la constitución de 1931 reconocía el derecho de la autonomía de las regiones que integraban la nación española. El estatuto de la autonomía catalán fue aprobado en 1932. El gobierno de Manuel Azaña también inició negociaciones para redactara un estatuto de autonomía vasco. Sin embargo, el país vasco solo obtuvo un estatuto de autonomía cuando ya estalló la guerra civil. Acabar con las presiones que ejercían tanto la Iglesia como el ejército sobre el estado español fue uno de los objetivos básicos de Manuel Azaña. Antes de proclamarse la segunda república, la influencia de la Iglesia abarcaba todas las esferas de la sociedad españolas. La constitución de 1931 declaró la libertad religiosa. El artículo 26 del texto fundamental establecía la separación de la Iglesia y del Estado. También acabó con las subvenciones estatales a las órdenes religiosas. Para terminar disolvió las congregaciones religiosas que jugaban fidelidad al papa, de modo que serraron muchas congregaciones religiosas, entre las cuales la de los jesuitas. La segunda república reconoció oficialmente el divorcio y el casamiento civil. En 1931 en un país fundamentalmente agrario como España, el problema social más importante era el de la posesión de la tierra. La reforma agraria preconizada por Manuel Azaña

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