Le débat sur l'avortement (document en espagnol)

Hay dos posturas principales con respecto al debate del aborto, pro-elección y pro-vida. Ambos argumentos coinciden en que las personas tienen derecho a la vida, pero difieren sobre la vida que protegen: la de las madres, o la de los fetos.

Los partidarios de pro-vida creen que el feto es vida humana desde el momento de la concepción, lo que significa que la mayoría de ellos no aceptan el aborto bajo ninguna circunstancia. Los cristianos son, por lo general, pro-vida, especialmente los católicos, como la Iglesia Católica afirma: "El aborto directo, es decir, querido como un fin o como un medio, es gravemente contrario a la ley moral". El problema con el argumento pro-vida es que, a pesar de que sus seguidores consideran que el feto es otra vida humana, muchos otros lo consideran como “una vida potencial”. Este problema se encuentra en muchos argumentos a favor de la vida, sobre todo en los 10 Mandamientos, donde dice claramente “No matarás”. Esta declaración se dirige a los seres humanos, y, según los partidarios pro-vida, también incluye al feto. La gran pregunta es: ¿se le puede realmente dar valor a una vida en potencia? Casi todos los argumentos a favor de la vida se basan en torno al absolutismo, sin dejar lugar a meditar sobre las consecuencias o las diferentes situaciones que involucran al embarazo.

“La santidad de la vida” es una frase acuñada por mucha gente religiosa, refiriéndose a que la vida es un regalo de Dios. Esta declaración pinta automáticamente la destrucción de la vida humana como algo malo, que, en la mayoría de las circunstancias es correcto, pero tiene excepciones, por ejemplo, la guerra y la pena capital. Los afiliados de la preelección también clasifican el aborto como una excepción. Escrituras como Job 1:21 indican: “…Jehová dió, y Jehová quitó.” Esta es una clara indicación que, para los cristianos, la vida es un regalo de Dios, y destruirla o crearla es, además de antinatural, un intento de “jugar a ser Dios”, y esa es la razón porque el aborto está visto con tanto desprecio.

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